Hola queridos lectores de esté su blog, uno de los más chingones ( Tan sólo, porque yo estoy aquí) debido a cuestiones de salud (mi fiesta) me ausente un tiempo de la escritura, de antemano unas disculpas con usted querido y amable lector. Trataré en lo sucesivo de escribir más continuamente, bien a lo que voy, en está ocasión hablaré acerca de una cuestión de negocios… la religión, dirán, ¿Por qué de negocios? Acabada la lectura espero les quede claro el porque.
NOTA.- Si usted es ferviente creedor o fanático de alguna religión. Por favor evite llevarse una molestia y no lea. Esto no es para usted.
Hace algunos años, muchos, muchos, pero muchos años. Yo creía inocentemente en todo lo que me decía mi madre, mi abuela, mis tíos, mi familia, que tenía que ir a misa cada domingo para ofrecerle al señor la vida que me había dado y muchas otras cuestiones, se me enseñó también que tenía que confesarme cada determinado tiempo, que debía orar por las noches, que tenía que ayunar en ciertos períodos, que no tenía que comer carne otros tantos. Yo era tan devoto de la religión católica, que incluso fuí monaguillo y llegué a pensar en muchísimas ocasiones la idea de ser sacerdote.
Conforme fuí creciendo abrí los ojos y me di cuenta de muchas cosas. Si me pidieran englobar todo en una sola palabra con respecto a la iglesia, sería.- BASURA.
Eso es lo que pienso acerca de la IGLESIA y hablo de todas, cada una de ellas son una basura, unas más grandes que otras pero al fin y al cabo eso, son un negocio tan ruin y miserable, que son capaces en el nombre de dios de mentir, profanar y blasfemar en nombre de dios. Juegan con los sentimientos y creencias de millones de personas en todo el mundo, les fabrican mundos irreales, fantasmas, demonios, lugares inexistentes. Todo por una sola cosa el maldito y puto dinero. No hay más, es eso.
Antes de proseguir y que quedé muy pero muy claro. Yo creo en (dios), pero no en la iglesia, porque confundir los términos si son tan visiblemente opuestos, no lo entiendo. Dios no es el sacerdote que da misa cada sábado o domingo en un templo rodeado de lujos ostentosos, dios no es el papa Juan Pablo II, dios no es el que les pintan. O acaso se necesita estar en una imagen de oro para que sea el señor Jesucristo ó la “virgen” maría necesita de tantos adornos bonitos, patrañas. Necesita el vaticano tener la mayor colección de arte de los más grandes pintores y/o escultores de todos los tiempos evaluada en millones de euros.
Y es que, no es sólo la católica la que apesta, los Cristianos y sus oraciones y sus vivencías con el señor, los Mormones y sus reglas mamonas para entrar al reino de los cielos, los Testigos de Jehová y su empeño en molestarte todos los días llevándote la palabra de dios hasta tu casa, musulmanes y sus pinches guerras santas, los budistas con la re-encarnación de buda, etc. etc. Todas y cada una de las “religiones” en esté mundo son estúpidas, incongruentes y tan vacías. Pero lamentablemente por cuestiones sociales o por lo que ustedes quieran. Uno siempre tiene que tener su estandarte de la suya en lo más alto. Yo lo acepto, voy a misa regularmente no porque quiera, no porque crea, porque amo a mi mamá y a mi abuela y eso las hace felices.
Y hablando de mi abuela, que por cierto me ha quemado y tirado más de cinco libros por ser malditos y reveladores (Pareciera que como si todavía estuviera en el oscurantismo). Porque creer en las religiones si se matan por ellas, si se destruyen por ellas. Las religiones sólo quieren una cosa, riqueza, pero OJO no para todos sus fieles, no mis queridos lectores, riqueza sólo para sus más altos rangos en su clérigo. Me importa un carajo si tomo, fumo, maldigo, insulto, odio. Si dios me dio esos y mucho más sentimientos porque los tengo que omitir. Porque tenerle miedo a dios y a que nos juzgué, que no se supone que dios es puro amor, porque me habría de castigar y hacerme cagar sangre en el infierno.
Otras de las cosas, que más detesto. Son aquellas personas que van al templo o a misa o como se llame su lugar de oración. Y salgan viboreando y que todavía se las den de santos diciendo que ellos si se van a salvar. Que gran farsa, pero que gusto me da sus caras cuando les digo, yo me voy a ir a cielo, yo voy a estar en el paraíso y los miraré desde arriba bola de pecadores. Se indignan, empiezan a maldecir, a perjurar como no lo tienen que hacer. O díganme sino, quien es más pecador, alguien que no va a misa, pero trata de hacer las cosas bien con su prójimo y ayudar a quien mas lo necesita. O aquel que va a misa, pero es un egoísta de mierda que sólo piensa en sus necesidades.
Que me castigue dios, pero yo, yo prefiero ser el primero.
Sinceramente.
El Beck’s
